Entre olivos, muy cerca de la vega granadina, se encuentra el hogar de Manuel Sánchez Alfonso. Aunque nació en Málaga y creció en Sevilla donde se formó como abogado, ha elegido Granada para fijar su residencia. Desde hace dos años su cortijo ha dejado de ser la residencia de vacaciones para convertirse en su refugio, en el que disfruta de «los silencios del alba, los susurros de la noche, el frescor de las alamedas y su fiel amiga la soledad» como recoge la dedicatoria de este libro que vio la luz el pasado mes de diciembre y se presenta el próximo sábado en la librería Picasso de la mano de la editorial Circulo Rojo.
Tomamos un café con el autor para conocer mejor su obra. Tras servirnos Antonio comenzamos la charla y te preguntarás por qué menciono al camarero y es que Manuel Sánchez en su afán de recuperar las buenas costumbres se lo preguntó nada más entrar a la cafetería, le gusta mirar a los ojos, charlar sin prisa y evitar las interrupciones digitales «de la sociedad de las pantallitas» como la ha bautizado. El móvil está acaparando demasiados espacios de nuestro día a día. Esos pequeños momentos que nos invita a redescubrir en Renglones Púrpura.
Este libro es fruto de una pasión por la lectura y la escritura que siempre ha acompañado a Manuel, «a raíz del aislamiento decidí parar, al principio lo que hice fue pelear con las incertidumbres y los miedos y al final me di cuenta de que tenía un mundo maravilloso frente a mí. Al salir a pasear brotaban las palabras que poco a poco fueron a más».
Así surgieron pequeños relatos, cuentos inspirados en el campo, la naturaleza, lo rural que invitan a plantearse una nueva filosofía de vida y a disfrutar con tranquilidad, «no vestidos de ropa deportiva, con dos bastones y a ver quién llega antes, eso no es el campo, es sentarse debajo de un chaparro y escuchar los pajarillos». Y así con todos los aspectos de la vida. «Vamos a volver a ser personas, lo que siempre hemos sido. Porque ahora te subes en el metro y no te mira nadie, todo el mundo tiene la vista fija en el móvil». De ahí su interés por hablar con las personas, conocer su nombre. La pérdida de la cercanía y el buen trato le llevan a interpelarse «¿Dónde está la persona? ¿Es este el progreso humano? Se ha perdido humanidad. En los últimos años ha habido una evolución científica y tecnológica fantástica pero dónde queda el ser humano. Creo que tiene que haber una nueva conciencia social y recuperar la faceta humana».
Uno de los principales males de esta generación son las prisas. «El objetivo tiene que ser vivir cada día, saborear las cosas y por eso en todos los textos hay un mensaje, una invitación a parar». De sus momentos de paz y boli en mano han surgido estos cuentos que ha recopilado en esta obra. «En mis momentos de transverberación lo que quiero es describir la belleza, escribir con palabras lo que con los ojos siento sin verlo». Le dedica sus palabras a un recuerdo, al jardín, a un olivo, al aire, a un amanecer o a la escarcha, entre otros muchos temas que protagonizan sus narraciones, instantes que son pura prosa poética para disfrutar en cualquier momento, en cualquier lugar. Renglones Purpura es un libro para el sosiego, para leer y releer mientras configuras en tu cabeza el lugar y el espacio al que te invita a viajar el autor.
Cómo resume Óscar Fábrega en su prólogo este libro es «una invitación a recuperar lo auténtico, lo real, las pequeñas cosas que hacen grande el día tras día». El próximo sábado a las doce de la mañana tendrán la oportunidad de conocer a Manuel que seguirá contándote más cosas de su forma de ver la vida, poniendo color y brillo al pasado para guiarte en un futuro lleno de luz. Pueden seguir al autor en Instagram @manuelsanchezalfonsoescritor
